Un 10, y un 0

Un gran descubrimiento y una enorme decepción gastronómica. Todo ello, sin salir de Asturias

Casi se acaban las vacaciones, pero no me puedo marchar del norte rumbo a Mallorca (¡¡¡algo de solecito por fin!!!) sin recomendar, muy merecidamente, a un restaurante cerca de Ribadesella que se llama La Güertona, en una aldea que se llama igual, saliendo de Ribadesella por la ruta hacia la cueva de Tito Cubillo. Búsquenlo por internet o con el chisme éste del coche, pero encuéntrenlo como sea porque es uno de los descubrimientos del verano. Parece una casa moderna de veraneo, un poco perdida por un camino, que después de la cueva, no lleva a ninguna parte. Sin embargo, tiene una terraza muy agradable - suponiendo que haga sol o calor, lo que este año es mucho suponer - y un comedor interior fresco, abierto al campo y a las montañas de los Picos de Europa que es una película de cambios climáticos constantes.

Hoy hemos hecho comida de despedida, así que hemos pedido una especie de picnic con todo lo que nos ha gustado de las cuatro visitas que hemos realizado; buñuelos de bacalao, croquetas de jamón, calamares al ajo tostado, ensalada de tomate de aquí con cebolla roja, salpicón de bogavante con salsa de yogur, chips de patata con pulpo y pimentón dulce, la hamburguesa ecológica de ternera, y hemos terminado con las deliciosas croquetas de manzana con foie fresco... y una botella de Anima Negra de Mallorca, fin de fiesta tremendo. Un sitio muy recomendable - las chicas del servicio son encantadoras y la comida un 10. Volveré.

A donde no pienso volver, ni invitado por los dueños a comer gratis el resto de mi días, es al famosísimo Casa Gerardo, el único restaurante con estrella Michelin en Asturias. Se ve que no estaban ni Gerardo ni su mujer el día que distribuyeron las estrellitas... una atención telefónica de horror, desagradable, no auguraba nada bueno.

Casa Gerardo

Una vez allí, el trato en directo iba de mal en peor, nos miraban de arriba abajo como si hubiéramos entrado a pedir limosna, nos sentaron de cualquiera manera, nos tiraron las cartas a la cara... en fin, desastroso, y con una comida corriente, corriente, sin más. Tenía mucha fama cuando era todavía el típico chigre con menú fijo de crema de nécoras, fabada y arroz con leche- pena que decidiesen desarrollar el negocio sin que acompañara ni la cocina ni sus habilidades sociales...



En un lugar de la América profunda

Las vicisitudes de una camisa en el laberinto sentimental de Brokeback Mountain

Yo soy, si no la única, la mejor camisa que tiene Ennis del Mar, o una de las mejores.

Me gusta, cuando me saca de la mochila, cubrir su rudo cuerpo de vaquero, y no me importa que sude, o que me manche, porque sé que después me lavará en el agua del río con mucho cuidado y volveré a quedar limpia como antes.
Hoy es el último día en Brokeback Mountain, y aunque no me he enterado muy bien de lo que ha pasado, creo que los dos chicos se han enamorado, cosa que me parece muy bien, por supuesto, porque desde luego Jack Twist parece un buen muchacho, pero, y aunque sólo soy una camisa, me da la impresión de que no lo van a tener fácil.

Ninguno de los dos.

Por eso, yo creo que por eso, porque lo saben, antes de despedirse se han puesto a pelearse, en broma, claro, pero como son jóvenes, y por lo tanto fuertes, se han acabado haciendo daño y Jack ha dado un puñetazo en la nariz a Ennis y le ha hecho sangre, y entonces Ennis se ha limpiado la sangre con mi manga y me ha manchado.

A mí eso no me ha importado, eso, que me manche, porque sé que después me lavará, como hace siempre, en el río, y la mancha desaparecerá, y volveré a ser la camisa limpia y casi nueva que soy siempre, pero con lo que no contaba, y seguro que Ennis tampoco, es con que Jack me robara, bueno, no sé si a lo que ha hecho se le puede llamar robo exactamente, pero el caso es que me ha metido en su mochila cuando Ennis no le veía.

No sé por qué.
Ha llegado el momento de desmontar el campamento y espero, impaciente, que Jack haya reflexionado y me devuelva a Ennis, pero no sólo no lo hace, sino además, cuando  mi dueño le pregunta por mí, le responde que no sabe dónde estoy.

A mí, aunque me da un poco de pena porque ya me había acostumbrado a Ennis, como Jack me cae bien, pienso, estoy convencida de que me tratará igual que mi antiguo amo, y que incluso algún día me devolverá a él, pero enseguida descubro que no sólo no lo hace, sino que tampoco me trata como yo creo que se debe tratar a una camisa.
Porque no sólo no me lava inmediatamente para que la mancha no se quede para siempre en el tejido, sino además me lleva a una casa perdida en medio de la nada, donde viven sus padres, unos señores muy tristes, y me sube a la que había sido su habitación de pequeño, y me cuelga en el armario en una percha, debajo de la camisa que llevaba él cuando se había peleado, en broma, con Ennis.
Y aquí me quedo.
Pasa el tiempo, mucho tiempo, y sólo el viento de la montaña Brokeback, cuando se cuela por entre las rendijas de la ventana cerrada, me trae alguna noticia de los jóvenes enamorados, y me entero de que los dos se han casado y han tenido hijos, de que sólo se ven un par de veces al año, y de que no se atreven a estar juntos, bueno el que no se atreve es Ennis, mi antiguo dueño, porque Jack sí se atrevería, y también me entero de que su amor sigue siendo el mismo, aunque nunca hay que fiarse mucho del viento, sobre todo del de las montañas, porque no siempre dice la verdad, pero yo le creo, porque, aunque sólo soy una camisa,  tengo mi corazoncito y soy una sentimental, no puedo evitarlo, y también porque hace mucho que perdoné a Jack, no sólo que no me lavara y que siga sin hacerlo, sino que me haya dejado abandonada aquí, en este lugar tan triste y tan solitario.

Sigue pasando el tiempo y un día, hoy, de repente oigo, no voces, porque en esta casa que parece un cementerio nadie habla en voz alta, pero sí una especie de susurro, como si alguien hubiera venido de visita y quisiera algo.

Oigo pasos por la escalera.

Un hombre entra en esta habitación a la que solamente la madre de Jack viene una vez al año a limpiarla.

El hombre, al que al principio no reconozco, da unos pasos por el cuarto, abre la ventana y, cuando la luz del exterior ilumina el armario abierto, se acerca a mí, y a la camisa que me cubre, y me descuelga.

¡Es Ennis del Mar!

¡Es él!

Un poco más envejecido y con una expresión, que no tenía en Brokeback Mountain, bastante sombría, pero él, en persona.

Me emociono y él también se debe de emocionar porque me abraza, bueno, nos abraza a las dos, a su camisa, que soy yo, y a la de Jack.

Entonces me entero, no porque Ennis me lo diga, que no me lo dice, sino porque no hace falta ser muy lista, aunque yo lo soy, para intuirlo.

Me entero.

De que Jack ha muerto, aunque creo que jamás sabré cómo, de qué.

“¡Llévame contigo!”, me gustaría decirle, pero no hace falta, porque lo hace.

Baja la escalera con las dos camisas enrolladas y la señora Twist le dice con un gesto que puede llevárselas y le da una bolsa de papel para que nos meta en ella.

Y nos mete.

Y subimos con él a su coche.

Y abandonamos ese triste lugar en el que he pasado la mayor parte de mi vida.

Ha pasado más tiempo, no mucho más, pero algo más, y ahora, por fin, puedo decir que soy feliz.

No sólo vivo en la caravana de Ennis, colgada de un clavo del armario al que le da la luz cada vez que lo abre, sino además ahora soy yo la que ocupo el puesto de honor, porque desde que llegamos aquí, mi amo cambió la posición de las camisas y puso la de Jack debajo de mí.

Además, tampoco me importa no estar limpia porque he comprendido por qué mi mancha es tan importante.

Y me gusta, me gusta mucho, estar en esta percha, colgada de este clavo, y ser yo, ahora, la que abraza a la otra camisa, pero sobre todo me gusta la postal que está clavada con una chincheta a mi lado, la postal de Brokeback Mountain, donde mi amo y yo fuimos tan felices.

vaqueros


Funcionarios de quita y pon

Hay funcionarios y funcionarios. Los fijos que nadie tocará son los que están en las redes clientelares: los del partido, los del sindicato…

Se han convocado más de mil plazas para el Ministerio de Justicia. Seguramente necesarias. Si pensamos en la lentitud de este servicio público, imprescindibles. Su defectuosa productividad se debe a su secular pereza, de la que se contagia todo el que llega. Habrá así mil perezosos más mientras esperan los legajos.

¿Cómo es que se convocan plazas en un momento en que se cuestiona el número de los mismos? ¿Por qué se hace cuando quedan un par de días para el final de la legislatura? Quien piense que es para colocar a amigos o fieles de partido, es un malpensante. Pasado mañana habrá que echar a veinte mil, como en Grecia, o a doscientos mil, como en Gran Bretaña, o a los que sean de los institutos y colegios públicos de la Comunidad de Madrid o de los hospitales de Cataluña. Habrá que despedirlos porque, simplemente, no hay dinero para pagar. Pero seguramente no saldrán muchos de esos mil que ahora entran. Lo mismo ocurre en la Universidad, donde los sociatas están colocando a sus amigos, mientras dejan de renovar a quienes son de otro palo. El caso es abrir hueco.

Reconozcámoslo. Los funcionarios han sido uno de los colectivos que más ha cargado con la crisis. En parte, por una fama bien ganada. Por otra parte, porque es donde es más fácil cortar: reducir la nómina está a tiro de piedra. Recortar en sanidad o educación tiene el inconveniente de molestar más al cuerpo de votantes. Pero, ahora nos damos cuenta de que hay funcionarios y funcionarios. Y en esa distinción nada tiene que ver la productividad, las horas de trabajo, la disponibilidad o la vocación de servicio al ciudadano. Los funcionarios-funcionarios, los fijos que nadie tocará, son los que están en las redes clientelares: los del partido, los del sindicato. A esos, se les pone y se les blinda. No sea que los que vengan les vayan a dejar en la calle.

Funcionarios


La dulce huella

Materiales de primera calidad, creatividad, inspiración natural, innovación, valores sociales y medioambientales para transmitir emoción, armonía y bienestar.

Son los pilares de El Naturalista y pude constatarlo hace unos días bajo el techo abovedado de la sala privada de la pastelería Mamá Framboise. Allí, acompañada por nuestra editora de Estilo de Vida, Colleen Murphy, mientras disfrutábamos de la compañía y exposición de la Responsable de Comunicación de El NaturalistaCecilia Puig y degustábamos el suculento buffet-desayuno, se produjo de forma espontánea y muy natural -como no podía ser de otra manera siendo quienes eran los anfitriones- un momento de realismo mágico en el que los zapatos se subieron a la mesa, y con el espontáneo y distinguido "touch" de la estilista Renée López de Haro, que se encontraba allí, treparon con elegancia hasta los platos, creando un improvisado y atrayente camino de mesa con las diversas exquisiteces de la casa y algunos de los modelos más punteros y conceptuales que la firma de calzado presentaba de cara a la próxima temporada otoño-invierno.

                                 Mamá Framboise  

Presentación de Prensa El Naturalista Otoño Invierno 14/15 en Mama Framboise.

En ese instante y espacio surgieron increíbles maridajes entre "dulces y suelas": tiernos croissants rellenos de frambuesa o chocolate con delicadas botas de interior de bambú, golosas galletas de frutos secos con tentadoras botas tricotadas y con trazas de fibra en la suela o refinados bocados de jamón ibérico en pan de cristal con botines masculinos de sofisticada inspiración campera y suelas marcadas por herrajes y heno. La verdad es que no sé qué tiene esta firma que armoniza tan bien con la buena gastronomía, aunque creo que son sus excelsos procesos creativos, los innovadores ingredientes y la maestría con que los trabajan. De hecho, una de sus últimas iniciativas fue un Show Cooking de Dani García en su anterior restaurante marbellí, Calima, en el que se fusionaron moda y alta cocina.

Show Cooking de Dani García

Botas camperas, las características suelas de El Naturalista, el modelo inspirado en el campo andaluz, herrajes y heno.

Perdí la noción del tiempo atrapada por las elegantes ventosas de los Octopus, la nueva, elegante y sorprendente línea de calzado femenino, cuyos tacones, colorido y suelas han sido ideados bajo la influencia del pulpo, que además de por sus ocho tentáculos, flexibilidad y fuerza, es conocido por ser un manjar marino de fabulosas propiedades.

Octopus

Modelo Octopus para aferrarse bien al suelo, los detalles de El Naturalista.

Fue un auténtico placer, en todos y para todos los sentidos, comprobar la buena manufactura nacional y asistir a la confluencia de empresas españolas que caminan por la vida y la cocina, compartiendo talento y valores. En esta ocasión, se producía de forma casual entre el trabajo del jovencísimo y gran chef pastelero de Mama FramboiseAlejandro Montes (Mejor Pastelero Joven de España 2006, Mejor Chocolatero de España 2007 o Medalla de Oro del Open de France de Desserts 2010) y el del equipo de El Naturalista, una de esas empresas que dejan huella y demuestran que hay otra forma de hacer las cosas. Como podréis imaginar, caí rendida a sus pies y me puse las botas.

Alejandro Montes

Modelo de El Naturalista, suela inspirada en Tower de Norman Foster.

¿Ha dejado de bajar el precio de los pisos?

La corrección del mercado inmobiliario aun no ha finalizado. Las grandes bajadas en precios de pico, tal vez si.

A lo largo de los últimos meses han sido varias las estadísticas que han apuntado a una subida de los precios de los pisos. Vamos a explicar si es verdad que los precios de los pisos han dejado de bajar  o si, simplemente, los precios bajan a un menor ritmo.

Con el fin de usar datos que sean homogéneos en el tiempo me voy a valer de la estadística Fotocasa. Podría haber tomado cualquier otra que usara una misma sistemática de datos para el período de estudio tal que idealista, pisos.com, yaencontre.com o “El preciómetro”, pero me he decantado por Fotocasa por la facilidad de acceso a las series. Los resultados del análisis que realizaremos en este artículo serían casi los mismos independientemente de la fuente que hubiésemos usado.

Descripción del índice de Fotocasa y sus limitaciones:

·        Se trata de precios de oferta, es decir, los precios a los cuales los vendedores sacan a la venta sus viviendas. Estos precios varían a lo largo del tiempo, dándonos Fotocasa la fotografía a finales de cada mes correspondiente para una zona geográfica patria específica;

·        No recoge los precios de compra-venta efectiva, es decir aquellos a los que se acaban vendiendo las viviendas;

·        Los precios publicados son de euros por metro cuadrado.

Fotocasa

La única estadística existente que compila precios de compra-venta efectiva, es la Tecnocasa con las limitaciones de la misma. A falta de que Tecnocasa nos pueda decir mes a mes a qué precios se venden las viviendas, usamos los datos de Fotocasa. En este artículo no nos interesa saber si los pisos en España a final del mes de marzo de 2010, por ejemplo, se intentaban vender a 2.349 euros el metro cuadrado y el precio al cual se vendían finalmente, sino si la tendencia de los precios de oferta es a la baja, subida o estabilización del ritmo de subida o de bajada.

Basado en la experiencia que hemos tenido, es razonable pensar que, cuando los precios de oferta comienzan a subir a un menor ritmo, esto puede ser expresión de varias dinámicas que permanecen ocultas:

·        aumento de la oferta superior a la demanda de casas;

·        que los precios de compra-venta efectiva de los pisos puede ser menores que los de oferta;

·        que la diferencia entre precio de oferta y precio de compra-venta efectiva aumenta, es decir, que para vender los vendedores han de realizar cada vez mayores concesiones respecto a los precios de oferta;

·        que el precio de alquiler puede comenzar a aumentar dado que parte de la demanda de vivienda, por la razón que sea, se está yendo al alquiler;

·        dificultades de acceso a la financiación con lo que la demanda se contrae;

·        cambios fiscales que hacen a los compradores demorar la compra ante una bajada de precios por menor presión

El comienzo de la bajada de los precios de oferta y el aumento en el ritmo de su caída, es expresión de uno o varios de los siguientes factores:

·        que los precios de compra-venta efectiva de los pisos bajan;

·        que la diferencia entre los precios de compra-venta efectiva y los precios de oferta es mayor cuanto mayor es el aumento del ritmo de bajada de los precios de oferta;

·        que comienza a acumularse oferta sin vender con lo que la misma ha de bajar sus pretensiones en el precio de venta;

·        que aumenta el número de personas que demoran la adquisición de vivienda ante la expectativa de que los precios de los pisos (precio de oferta y de compra-venta efectiva) bajen.

Para ver si los precios de oferta han bajado o no, y por tanto poder sacar conclusiones sobre si los pisos de compra-venta efectiva están bajando hagamos el siguiente ejercicio:

·        tomemos la serie histórica de precios de oferta de Fotocasa para el conjunto de España;

·        miremos, para los intervalos de un año, seis meses y un mes respecto a los precios de hace un año, seis meses y un mes, en qué meses han bajado más o menos los precios de oferta de la vivienda por metro cuadrado;

·        todo lo anterior en porcentajes de subidas y de bajadas;

Una vez analizados los mismos, podremos llegar a conclusiones sobre lo que sucede en el mercado.

·        Tomaremos todos los meses, desde junio de 2006 (pico de precios de compra-venta efectiva a nivel nacional) según la estadística de Tecnocasa. Desde entonces hasta abril de 2014 disponemos de un total de 95 puntos de observación puesto que ya han pasado 95 meses desde entonces;

·        Tres cuadros: bajadas porcentuales en los últimos doce, seis y un mes respecto del mes correspondiente.

PRIMER CUADRO

Variación respectos a hace doce meses para toda la serie.

20 menores bajadas y subidas de precios   20 mayores bajadas de precios

SEGUNDO CUADRO

Variación respectos a hace seis meses para toda la serie

20 menores bajadas y subidas de precios   20 mayores bajadas de precios

TERCER CUADRO

Variación respecto al mes anterior para toda la serie

20 menores bajadas y subidas de precios   20 mayores bajadas de precios

 

Como se puede observar, de todas las observaciones realizadas, y para doce meses (mayo 2013- abril 2014)…

·        En el período de variaciones de doce meses, ninguno de los últimos doce meses se halla entre los 20 meses en los que los precios hayan subido más o bajado menos. Por contra, tres meses de los últimos 12, están en los puestos primero, quinto y dieciséis de las mayores bajadas interanuales de los precios de los pisos (los períodos de doce meses que comprenden hasta  mayo, julio y julio de 2013);

·        En el período de variaciones de seis meses, tres períodos que finalizan dentro de uno de los meses de entre los últimos doce (mayo de 2013 a mayo de 2014), ocupan los puestos 17, 19 y 20 de menores bajadas (diciembre de 2013 y enero y febrero de 2014); por contra tres meses ocupan los puestos tercero, sexto y décimo de los períodos de seis meses que finalizaron durante los últimos doce (desde mayo de 2013) en los que los precios de la vivienda más bajó (mayo, junio y julio de 2013);

·        En el período de un mes, tres meses se encuentran entre aquellos en los que los precios más han subido/menos han bajado respecto a los precios del mes anterior, ocupando los puestos 4, 14 y 20. Por el contrario, ninguno de los últimos doce meses se hallan entre aquellos en los que los precios hayan bajado más respecto del mes correspondiente anterior.

Conclusiones de los números:

·        Es aún demasiado prematuro para decir que el ritmo de bajada de los precios de los pisos haya descendido; como hemos visto, varios de los meses dentro de los últimos doce corresponden a las mayores bajadas en la serie histórica. La velocidad de bajada la entendemos en porcentaje respecto del precio anterior observado;

·        Es cierto que, respecto al punto de partida que es cien (el precio de pico), las bajadas en términos absolutos son menores aunque en términos porcentuales respecto a las ultimas acaecidas, sean las mismas o mayores. Una bajada de 30% respecto a 100 euros quiere decir que el precio baja 30 euros a 70, el 30% respecto a 70 euros son 21 y así sucesivamente;

·        El ritmo de bajada, respecto a precios del año anterior, para un solo año, es de 1,04% en 2007, 8,70% en 2008, 9,99% en 2009, 3,83% en 2010, 6,63% en 2011, 10,46% en 2012, 8,51% en 2013 y 1,16% en los cuatro primeros meses de 2014. Realizando una extrapolación de los datos de los primeros cuatro meses de 2014, este año acabará con una bajada de los precios de oferta de 3,48%, es decir, como el segundo año de menores bajadas de los precios de los pisos desde que comenzó su desplome en 2006. Es muy posible que ahora nos hallemos en ritmos de bajadas de precios similares a los registrados en 2010.

Conclusiones para compradores/inversores:

·        La corrección del mercado inmobiliario aun no ha finalizado aunque las grandes bajadas en términos absolutos respecto a los precios de pico han llegado, tal vez, a su fin;

Pisos madrid


Aún es demasiado pronto para invertir: la salida masiva de vivienda al alquiler y la bajada de precios de alquiler con erosión de las rentabilidades del capital invertido, además de cambios fiscales que graven aún más la tenencia de bienes inmuebles, harán que los precios bajen. Un aumento de los tipos de interés, o bien la corrección el mercado de crédito puede llevar a repentinas y fuertes bajadas de precios de las casas

·        El dato más importante es que, estructuralmente en España ni hay demanda ni la habrá: en el grupo de edad de 10-24 años, respecto al de 25 a 38 años, existe el 38% menos de población.

* Borja Mateo es experto inmobiliario y autor de “La verdad sobre el mercado inmobiliario español”, así como de “Cómo sobrevivir al crack inmobiliario” (editorial Manuscritos)