Ventajas de los microprocesadores: cuando menos es más


informatica microprocesadores

Según la famosa ley de Moore, cada 18 meses los microprocesadores doblan su capacidad de cálculo y almacenamiento. Ello significa que nuestros ordenadores portátiles, agendas electrónicas, teléfonos móviles, y otros artilugios electrónicos se van haciendo más y más pequeños, de forma que pueden cumplir las mismas funciones, pero necesitan mucho menos espacio. A principios de los cincuenta, el ordenador mas updated ocuparia unas cuantas habitaciones de nuestro piso. Actualmente, tenemos más capacidad de memoria y cálculo en una cajetilla de cigarrillos (y aún sobra sitio para unos cuantos winstons).
El resultado? Los ordenadores van invadiendo cada vez más y más espacios que anteriormente, por cuestiones de tamanyo, les estaban vedados. La última frontera, recientemente traspasada, es la de la moda y el vestir.

Una vez más de la mano de las chicas y chicos de los MIT Labs, ese centro de inventar el futuro regentado por el mítico guru Negroponte, actualmente disponemos de los más variados dispositivos para avanzar en esa moda de silicio que da título a este articulo. Reunidos bajo al atractiva etiqueta de "wearable computers", es decir, "computadores llevables"; como si fueran unos boxers, o una minifalda, es posible ver algunas de sus innovaciones en la pagina del MIT dedicada al tema. 

Otra pagina muy interesante es la de ultimate future Dentro de esta moda inteligente, podríamos mencionar en primer lugar la microóptica, es decir, gafas (de sol, graduadas, de seguridad, para vacilar) que están conectadas a un ordenador portátil y/o a una cámara de video, de forma que nuestra visión queda modificada y amplificada.
Una posibilidad es acceder a información almacenada en nuestro portatil, directamente desde nuestras gafas, mediante un sencillo juego de botones, de forma que el texto se sobreimpresione a nuestra versión "normal" -como hacia el amigo Arnold en Terminator-. Las personas poco sofisticadas podemos acceder asi a nuestra agenda, o ver que hora es (como la Molly de Neuromante), pero un instrumento así puede ser de vital importancia para un neurocirujano, que puede acceder complejas informaciones vitales mientras realiza una operación, para el comandante de un buque de guerra, que obtiene información inmediata desde su dispositivo micro-óptico acerca del enemigo, o para un arquitecto, un agente de policía, un broker de bolsa que tiene que tomar importantes decisiones financieras en segundos... Las posibilidades son ilimitadas.

Aún es mas impresionante la idea de la realidad aumentada: es decir, filtrar las imagenes que recibe una camara de video (que puede estar instalada en nuestra frente, como si fuera algún disenyo tecno-masoquista de Gautier) y "decidir" como queremos ver la "realidad". Quizás nos apetezca que las imagenes aparezcan mas lentas, o a cámara rápida. Quizás preferimos tener una visión infrarroja, o ver en blanco y negro, o con los colores modificados. Las posibilidades son.. Exactamente!
Pero aqui no se acaban, ni mucho menos, las maravillas de esta moda de silicio. Otra posibilidad que nos brinda la ley de Moore es la de los ordenadores lavables. Es decir, ordenadores hechos de ropa, que pueden anyadirse a nuestra vestimenta diaria, por utilidad o diversión, que se adaptan sin problemas a nuestros tejanos o chaqueta, que nos permite disfrutar del ordenador a donde quiera que vayamos y, desde luego, podemos tomar un pringoso chocolate a la taza mientras navegamos por Internet si tener que preocuparnos por si se cae algo en el ordenador. Mas informacion en la pagina de computadores lavables.
Los profesionales de la electrónica, así como disenyadores y modistos, quizás demasiado metidos en su mundo de alta costura o de las tostadoras y Disc-man, cerrados por tanto al uso creativo de las nuevas tecnologías, parecen no hacer demasiado caso a esta moda de silicio, aunque abren todo un nuevo universo a la creación. Los más aventurados, quizas queráis crearos vuestro propio exoesqueleto cibernetico. Para ello, disponéis de la siguiente direccion web, imprescindible. 

Afortunadamente, hay un par de excepciones. Una es de corte industrial, y viene de la mano de Philips: se trata de las camisetas musicales: un sencillo sistema que permite irse con la música metida dentro de la camiseta, utilizando chips pre-grabables, con una selección de tu música favorita, un panel solar para no preocuparse de las pilas, y con los auriculares cómodamente instalados en un par de cordones al cuello, que ademas permiten ajustarlo. Mas información en la página de Phillips dedicada al futuro .
La otra excepción viene directamente del mundo de la moda y el disenyo: se trata de Pia Myrvold, una visionaria de la moda, que no tiene problema de zambullirse en la piscina de la alta tecnología. De hecho, los resultados de Myrvold recuerdan algunas veces más al arte medial que a la moda propiamente dicha, como un experimento que realizó pidiéndole al arquitecto Bernard Tschumi que le enviara un fichero audio con sus opiniones sobre la identidad en la ciudad. Myrvold realizó un análisis espectrográfico de la voz de Tschumi y estampó los resultados en un interesantisimo y provocador vestido..

El primer desfile de mención de Myrvold es Paris Identity, de 1994, donde trabajaba sobre bolsas de plástico de famosos grandes almacenes, creando vestidos haciendo un quilt con estos materiales de desecho industrial. Sin embargo, Myrvold ha conseguido dar un salto y escapar del movimiento del "arte povera" y acercarse al mundo de la alta tecnología e Internet, con amplias referencias al revolucionario movimiento de los "wearable computers" que estamos comentando aquí. Es de destacar su colección "African Cyberpunk Dandy", donde experimenta con las interrelaciones entre la circuitería de los microprocesadores y el simbolismo abstracto africano. También es muy sugestiva su colección "Body theory", donde juega con la tan querida idea de la hermenéutica de ver las ropas como ideas que nos describen e identifican y que necesitan de un ejercicio interpretativo por parte de los espectadores..


Vivimos en tiempos rabiosamente interesantes e increiblemente fugaces. La rápida fusión entre disenyo, arte, moda y tecnología nos lleva a conceptos y conjuntos cada vez más audaces, sugestivos y personales. Si la ley de Moore defiende el doblete de funcionalidad en los microprocesadores cada dieciocho meses, parece que la innovación en este campo híbrido entre el disenyo y la tecnología aun puede darnos mayores y más agradables sorpresas. Esperad lo impensable, y aún os quedaréis cortos...

No hay comentarios :