Reparador de arañazos para gafas: productos y trucos

Todos los que llevamos gafas lo hemos sufrido en más de una ocasión: el cristal se ha rayado. Las gafas son un accesorio del día a día, que siempre llevamos con nosotros, especialmente si las necesitamos para el trabajo, conducir, etcétera, por lo que, aunque llevemos cuidado en su mantenimiento o en la forma en que las guardamos, en normal que alguna vez los cristales de las gafas presenten algún que otro arañazo.

arañazos gafas


Para evitar que esto ocurra, o al menos para reducir al máximo las posibilidades de que las gafas acaben rayadas, es necesario seguir una serie de consejos como guardarlas siempre en su funda y no sueltas por el bolso, o evitar limpiarlas con todo lo que no sea el propio paño de limpieza que nos entregan junto a las gafas o cualquier otro paño suave, de microfibra especialmente. Limpiar las gafas con las servilletas de bar es una práctica bastante frecuente, pero totalmente desaconsejada pues prácticamente quedarán rayadas de inmediato.

Pero como decíamos, a pesar de nuestros esfuerzos por cuidar las gafas y evitar la aparición de arañazos, éstos, tarde o temprano, harán su aparición. Para reparar los arañazos de las gafas puedes seguir alguno de los siguientes trucos.

Puedes aplicar un pulimento micro-abrasivo para lentes ayudándote de las yemas de los dedos. Podrás encontrarlo fácilmente en tu óptica pero si es domingo y está cerrada, también puedes utilizar pasta de dientes o cera para muebles y aplicarla con un paño suave. Eso sí, no te olvides de aplicarlo a ambos lados del cristal.

Si además notas que los cristales de tus gafas ya no son tan transparentes como antes, prueba a limpiarlos con ceniza de tabaco y verá que el resultado es sorprendente.

¿Nada de lo anterior ha funcionado? Prueba entonces con una solución de amoníaco. Mezcla medio litro de agua con 15 ml de amoníaco. Humedece con él un paño suave y frota en círculos sobre el arañazo o arañazos en forma circular y sécalo bien con otro paño suave. Si es necesario repite el proceso.

Si finalmente no obtienes los resultados esperados, tal vez sea porque los arañazos sean demasiados en número o demasiado profundos. Si es así, visita tu óptica, siempre podrás aprovechar la montura y cambiar solamente los cristales.

ADVERTENCIA: si tus gafas aún están en garantía, no hagas nada de lo anterior, acude de inmediato a la óptica donde las compraste.

No hay comentarios :