La historia de la fotografía ha recorrido
distintas etapas en cuanto al soporte, los tipos de cámara y el acabado de la
imagen. El retoque fotográfico no es una práctica exclusiva de la era digital,
de hecho antes de los programas de manipulación, el retoque de la fotografía en
papel se llevaba a cabo con pinceles muy finos de pelo de camello, aerógrafos y
la destreza del buen retocador.
Actualmente, las herramientas del Photoshop
también incluyen pinceles y exigen mantener un buen pulso, pero cualquier error
puede solucionarse rápidamente: Menú, Edición / paso atrás.
Una buena manera de controlar los posibles
errores que surgen durante el retoque es duplicar la capa fondo: Menú, Capa
/ duplicar capa. De esa manera se conserva intacta la imagen
original. ¿Y para qué es útil conservar la foto original intacta, si hay
errores en ella que debo quitar? Por distintos motivos:
1. Si el proceso de retoque no ha resultado
satisfactorio, es conveniente reiniciar el trabajo antes que tener que corregir
un retoque mal realizado
2. Si el proceso de retoque va por buen
camino, podría darse el caso que partes de la imagen original sirvieran para
clonarse o pegarse sobre la nueva foto retocada
3. Suele ser agradable poder comparar el antes
y el después, para controlar que los ajustes realizados no anulen la frescura
original de la imagen.
Es importante organizar un plan de retoque. Si
mi trabajo consiste en mejorar la piel de una mujer y las tareas a seguir son
quitar marcas, suavizar la piel y mejorar el color, deberé seguir el orden
mencionado para obtener los resultados adecuados.
Para comenzar, la capa fondo (Capa A) se duplica y se llama con un
nuevo nombre (Capa B). Con el
tampón de clonar se quitan las imperfecciones del rostro. Si fuera necesario
podemos usar el parche o el pincel en una opacidad media para disimular las
uniones. El diámetro del pincel lo ajustaremos de acuerdo al tamaño de los
elementos que debemos tapar; la dureza del pincel debe ser suave para que no se
marquen las uniones y la opacidad y el flujo deberán variarse según vaya
avanzando con el trabajo.
Es mejor realizar varias pinceladas con
opacidad y dureza bajas a realizar una pincelada fuerte, ya que la primera se
mimetiza mejor con el entorno y el retoque parece natural.
Para suavizar la piel se duplica la Capa B y a
esta tercera capa la llamaremos Capa C. Debemos aplicar el desenfoque
gaussiano. Menú, Filtro / Desenfoque / desenfoque gaussiano.
Este filtro mezcla los colores de los píxeles
que estén vecinos el uno al otro, y la imagen pierde los detalles más pequeños.
La imagen se ve más suave y menos nítida, generándose un efecto similar al de
una fotografía tomada con una cámara fotográfica desenfocada.
La ventana que se despliega al elegir la
opción de desenfoque gaussiano permite al retocador elegir la intensidad del
desenfoque: cuanto más alto sea el radio de desenfoque elegido, mayor será el
efecto aplicado.
Una vez cumplido este paso debemos elegir la
opción de fusión de la Capa C (capa
desenfocada) con la Capa B (capa
donde se han corregido las imperfecciones de la piel).
Para realizar esta fusión es conveniente poner
la Capa C en Modo
superponer y
disminuir la opacidad de la capa a un 20% aproximadamente.
Las líneas alrededor de ojos, nariz y boca
deben permanecer nítidas para que el suavizado artificial en mejillas, frente y
mentón no se perciba como tal.
Para quitar las zonas desenfocadas que no se
precisan en la Capa C (y
para conservar aquellas que sí interesan) elegimos trabajar con la goma o con
una máscara. La goma suele ser más sencilla de utilizar para el retocador
principiante, pero el uso de la máscara ofrece ventajas inigualables.
Al crear una máscara sobre la Capa
C, el pincel con color negro oculta lo que no precisamos y el
pincel con color blanco recupera las partes ocultadas en caso de que las
necesitemos.
La gran diferencia entre la goma y la máscara
es que la goma desecha los píxeles, es decir hay pérdida de información. La
máscara en cambio permite volver una y otra vez a los píxeles de nuestra
imagen, facilitando los procesos de recorte de figuras.
Por último, debe añadirse textura a la piel
para disminuir el efecto creado con el desenfoque. Menú:Filtro / Ruido / añadir ruido.
Solucionados los problemas de la piel, el
retoque debe continuar con los ajustes de color. Para quitar los ojos rojos en
las fotografías tomadas con flash, una manera práctica y sencilla de hacerlo
es:
1. Seleccionar con la herramienta de selección
(opción forma oval) el círculo rojo.
2. Ir al menú Imagen
/ Ajustes, elegir la opción Tono / Saturación y reducir la saturación de los rojos.
Esta misma metodología de selección y ajuste
sectorizado de color puede realizarse para blanquear dientes, oscurecer cejas,
enrojecer labios, etc.
El retoque finaliza con un ajuste de niveles,
curvas y corrección selectiva: de esta manera se logra buena información y
buena lectura tanto en las luces como en las sombras y se obtienen colores
libres de dominantes molestas.
Sin duda los programas de manipulación
digital, el Photoshop en primer lugar, agilizan el proceso de acabado de la
fotografía, pero tanto el papel como la computadora exigen práctica y un plan
de retoque a seguir paso a paso con destreza y habilidad en la mano.
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