¿Qué es un certificado de eficiencia energética?

El Certificado de Eficiencia Energética o Certificado Energético es un documento de carácter oficial realizado por el técnico autorizado para ello que describe y certifica las características energéticas de un inmueble asignándole una calificación concreta dentro de una escala que va desde la A (máxima eficiencia energética) a la G (mínima o nula eficiencia energética), similar a las pegatinas informativas que podemos encontrar en un frigorífico, lavadora, lavavajillas, etcétera, pero aplicado a los inmuebles.

Desde el primero de junio de 2013 todas las viviendas en venta o alquiler en España deben de contar con su correspondiente certificado de eficiencia energética; en caso contrario el propietario se enfrentará a multas que van desde los 600 hasta los 6000 euros.

El certificado de eficiencia energética mide la energía consumida todos los años en condiciones normales de uso y ocupación teniendo en cuenta todos los servicios que se utilizan de manera habitual como pueden ser la calefacción, el agua caliente, la iluminación, etcétera. En base a ello se calcula la emisión de CO2 de la vivienda expresada en kilos por metro cuadrado al año. El resultado determinará la calificación: las emisiones por debajo de los 6,8 kg CO2/m2 al año se le asigna la letra A, la mejor calificación mientras que la peor nota, la G, corresponde a las viviendas  que superan los 70,9 kg C02/m2 anuales.

El certificado de eficiencia energética deberá ser entregado por el propietario de la vivienda al comprador en el momento de efectuarse la operación; para el caso de alquileres, deberá entregar una copia a los inquilinos en el momento de formalizar el contrato. Es decir, no existe posibilidad de hacerlo a posteriori. 

Para obtener el certificado de eficiencia energética el propietario del inmueble tiene total libertad para elegir al profesional habilitado para ello, cualquier arquitecto o ingeniero).

Respecto a su coste, no existe un precio marcado por la ley, cada arquitecto o ingeniero tiene libertad para realizar una propuesta y que ésta sea aceptada por el interesado. Los precios pueden variar desde los 25-30 euros hasta los 250-300 euros si bien estos últimos serán mucho más completos y ajustados a ley que los primeros en la gran mayoría de ocasiones.