El sector de la videncia y las predicciones futuras siempre está repleto de polémica. Hay quien lo considera ciencia, quien piensa que no es más que cuestión de creencia y, por supuesto, quien considera a los videntes unos simples estafadores que aprovechan la ingenuidad, desesperación de determinadas personas para obtener un beneficio económico.
Además, con la expansión de internet, la videncia es un fenómeno en auge. Cada noche las pantallas de nuestro televisor se llenan de videntes que, vía telefónica, aseguran poder ayudar a cualquier persona con cualquier problema. Incluso existen canales de televisión que emiten las 24 horas del día este tipo de contenidos. Todo ello ha hecho que algunos hayan adquirido un desmesurado protagonismo, no tanto por su capacidad de acierto como por ciertas actitudes que podríamos denominar extravagantes; seguro que todos recordáis, aunque sea vagamente, a La Pitonisa Lola, a Sandro Rey, a Cristina Blanco y así un largo etcétera.
El Diccionario de la Real Academia de la Lengua Española define al vidente en sus acepciones segunda y tercera como:
2. Persona que pretende adivinar el porvenir o esclarecer lo que está oculto.
3. Persona que tiene visiones sobrenaturales o que están fuera de lo que se considera común.
Igualmente, la videncia aparece definida simplemente como la "actividad del vidente"
Unas definiciones por tanto las de la RAE muy generales y que, evidentemente, en modo alguno esclarecen si nos encontramos ante algo real o imaginado.
En cualquier caso, y dejando de un lado la polémica, hablar de mejores o peores videntes dependerá en la inmensa mayoría de ocasiones de la propia experiencia personal de su cliente, es decir, alguien que acude a un vidente en búsqueda de consejo y éste le sirve, de uno u otro modo, de ayuda, considerará que está ante un buen vidente, recurrirá de nuevo a él, creerá en él y también le recomendará. Sin embargo, no debemos perder de vista que aquella persona que recurre a un vidente ya se le presupone, al menos, cierta inclinación a creer en la videncia.
Laura Vera, Noelia, Raquel, Pepi, Marisa, Maribel, Maica, Reme, Malen Olga, etcétera, son consideradas algunas de las mejores videntes en España por sus usuarios. Como aspecto llamativo, apreciad que su fama dentro de este sector hace que prácticamente todas ella sean conocidas sólo por sus nombres de pila de tal forma que cuando se habla de la Vidente Olga, todos los que estén familiarizados con la videncia saben de quién se está hablando.
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