¿Qué son los implantes dentales?

Los implantes dentales son los sustitutos de las piezas dentales naturales. Consisten en un tornillo fabricado en titanio que se une al hueso de la mandíbula y del maxilar conformando lo que será la nueva "raíz" del diente. Una vez que este tornillo ha quedado perfectamente fijado al hueso, se coloca una funda o puente fijo y de esta manera ya queda colocada la nueva pieza dental, estable, segura y para siempre.

implantes dentales


Los implantes dentales no se realizan de forma estándar si no que siguen una estructura concreta y personalizada de acuerdo a cada paciente.

Colocar un implante dental no es una proceso rápido, si no que requiere de un estudio previo y varias fases. En primer lugar, y ayudado por un potente programa informático, el especialista realiza un estudio que desembocará en un plan personalizado para cada implante dental. Posteriormente, y a través de una técnica de cirugía guiada, se colocan los implantes, es decir, los tobillos de titanio. Esta técnica permitirá colocar las piezas nuevas abriendo mínimamente la encía, lo cual disminuye en gran medida tanto la inflamación como el dolor.

Colocado el implante, habrá que dejar pasar al menos dos meses con el fin de que ese tornillo de titanio se integre bien en el hueso y cicatrice perfectamente. Durante ese tiempo nunca te quedarás sin dientes pues se coloca una corona o prótesis temporal. Entonces el especialista colocará una pieza llamada "pilar", un elemento intermedio entre la nueva "raíz" (el tornillo) y la corona. 

El último paso es colocar la corona, es decir, la pieza dental en sí misma, que quedará fijada de forma segura lo que nos permitirá llevar una vida absolutamente normal.

Un aspecto que siempre preocupa a cualquier persona necesitada de uno o varios implantes dentales es el dolor. Los implantes dentales se realizan con anestesia local por lo que no se sienten dolores ni molestias. Además, la técnica empleada es mínimamente invasiva pues de hecho, en ocasiones, ni siquiera es necesario abrir la encía por lo que tampoco se hace necesario dar puntos.

La gran ventaja de los implantes dentales es su naturalidad, es decir, sentirá estos nuevos dientes como tuyos, podrás comer con absoluta normalidad, sonreír como siempre, pues quedan perfectamente fijados e integrados con el resto de piezas dentales por lo que no notarás nada extraño.

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